Para los amantes del cine y la ciencia ficción, el 6 de octubre de 2017 era una fecha marcada desde hace tiempo. Blade Runner, uno de los clásicos sci-fi prolongaba su reinado con el estreno de su secuela, Blade Runner 2049.
Tranquilos, sé que vivimos en una época donde el spoiler se castiga con todo tipo de destierros sociales, así que este artículo no tiene otra intención que pasados 35 años, repasar la tecnología presentada por la película original. Una visión desde 1982 hacia un futuro ciberpunk situado en el 2019.
¿Cuánto nos hemos acercado al mundo en el que Rick Deckard perseguía a los replicantes?
Ciudades contaminadas
La visión general que presenta Blade Runner es la de una ciudad consumida. Una urbe sobresaturada que ha visto cómo la suciedad cubría sus calles y la polución se adueñaba del aire.
Hoy por hoy y pese a la distancia con la situación presentada en la película, las ciudades cada vez parecen acercarse más a esta escena. Nuestra gran esperanza es que las Smart Cities cambien el rumbo al que parecemos abocados, donde la contaminación, la superpoblación y el caos circulatorio afectan cada año a un mayor número de ciudades. No obstante, cabe tener en cuenta que las maravillas que ofrece una ciudad inteligente, pueden no ser tales si la tecnología no se instaura de forma homogénea, o incluso si una vez esté instaurada padece un fallo global.
Señalización digital. Publicidad a gran escala.
La mítica imagen del gigantesco panel televisivo puede que ya ni siquiera impresione a una gran parte de quienes estén leyendo esta entrada. “Simplemente es una televisión grande”… bueno, ok. Puede que la tecnología necesaria (LED) exista desde hace tiempo y simplemente se haya tenido que construir a lo grande, ok. Pero el hecho es que ya hemos incluso superado esa visión.
Tanto en Las Vegas cómo en Asia existen paneles LED de miles de metros cuadrados. Pero la novedad del momento se presenta en medio de Times Square, donde se ha instaurado un panel de más de 400 metros cuadrados, y en 3D. Sin palabras.
Spinners
Un clásico dentro de la ciencia ficción; Los coches voladores. Blade Runner presentó su visión con el famoso “spinner”, un vehículo diseñado por Syd Mead y que ha aparecido en otras películas como Star Wars, con el que Rick Deckard podía circular tanto por las calles cómo por el espacio aéreo de la ciudad mediante un despegue vertical.
Pese a que no, nada indica que vayamos a tener spinners por nuestras calles en breve (personalmente doy gracias a ello) nada tiene que ver con la falta de la tecnología necesaria. Actualmente existen multitud de modelos de vehículos extremadamente parecidos a los spinners, cómo el Lilium Jet que es capaz de despegar y aterrizar en vertical. Problemas de coste, legislación y cierto aprecio por la vida parece que van a seguir frenando el uso de este tipo de vehículos. Mejor seguir trabajando por los coches autónomos y eléctricos que se presentan como el mejor medio de transporte futuro.
La máquina ESPER
La Esper es una máquina que permite a Rick Deckard hacer un descubrimiento relevante en la película y que todo fan conoce bien (el ruido de su funcionamiento es una especia de música celestial para los tech-fans). Hablamos de una maquina capaz de escanear fotografías y que ofrece la posibilidad, mediante comandos de voz, de realizar zoom sin ningún tipo de límite y mover el ángulo de visión de la fotografía para revelar zonas que no aparecen en el ángulo en el que fue tomada la imagen
¿Imposible? No del todo. Vayamos por partes…
Actualmente Google ofrece un sistema de recuperación de imágenes de baja calidad excesivamente pixeladas. Pixel Recursive Super Resolution mediante el uso de Inteligencia Artificial puede mostrar de forma nítida una imagen de apenas 64 píxeles. Aquí un interesante artículo de la La Vanguardia que da más info del programa.
Por otro lado, si pensamos en la tecnología que utilizan las Hololens para reconocer los elementos de una habitación, no es descartable poder llegar a rotar a nuestro antojo por una imagen que ofrezca la misma información que la que almacenan los sistemas que realizar recreaciones en 2D, 3D o los propios hologramas. El concepto de la fotografía puede dar una nueva vuelta de tuerca en cualquier momento ya que con las opciones de grabación 360º y 3D, todo es posible.
La humanización de las máquinas
Los replicantes Nexus-6 de Blade Runner son máquinas con una apariencia indiscutiblemente humana, y en la película únicamente pueden ser distinguidos de una persona al uso mediante complejos test psicológicos. Actualmente la robótica está siendo impulsada en todos sus campos, y muchos centran sus esfuerzos en hacer que la apariencia de las máquinas cada vez sea más y más humana. El laboratorio de Hiroshi Ishiguro invierte en todo tipo de tecnologías para brindar a los androides un aspecto lo más humanizado posible. Y lo consigue en gran medida. Pero pese a su increíble realismo en estático, cada vez que estos robots deben realizar un mínimo movimiento, se convierten en animatrónicos de feria y el truco salta por los aires.
El “corazón” del Replicante
Se trata de un subgénero dentro de la ciencia ficción. Robots, humanoides o máquinas llegan a tal nivel de raciocinio que empiezan a pensar por sí mismas y se adentran en un complejo mundo filosófico; “¿qué somos?” “de donde venimos” “a donde vamos?” “¿Cual es el sentido de mi existencia?” Una especie de adolescencia emo que cala en sus circuitos y desemboca en una búsqueda vital para la que nunca fueron programados.
Actualmente tecnologías cómo la Inteligencia Artificial o el Machine Learning permiten a las máquinas aprender por si mismas a realizar multitud de tareas. Y este avance no hará más que evolucionar sus capacidades a gran velocidad y escala. Sin embargo, la incógnita sobre el funcionamiento de nuestro cerebro (cómo implantar o crear recuerdos) hace que estos conceptos sigan siendo una utopía apenas planteable.
¿Tenemos máquinas inteligentes y capaces de aprender tareas por si solas? Sin duda. Un gran numero de empresas e industrias ya empiezan a beneficiarse de ello. ¿Que ya existen casos en los que una Inteligencia Artificial se ha llegado a “descontrolar”? También, y aquí va un sonado ejemplo; La IA de Facebook que creó su propio idioma.
Bonus track
A lo largo de Blade Runner podemos ver un sinfín de detalles futuristas y merece la pena despedirnos pasando por encima de algunos elementos que hasta el momento dejábamos atrás por su poco impacto, pese a que se vaticinaron hace más de treinta años.
Videollamadas. En la película vemos a Deckard realizar una videollamada mediante un aparato del tamaño de un pequeño televisor. En los años 80, donde ni tan siquiera existan los móviles o las pantallas planas, era toda una promesa de futuro. Hoy en día todos llevamos en el bolsillo un smartphone capaz de realizar este tipo de llamadas sin dificultad.
Mezcla idiomática. En Blade Runner así como en otras películas/novelas situadas en el futuro, se apuesta por un idioma global generado por la globalización en el que se mezclan palabras y expresiones de todos los idiomas indistintamente. Actualmente podemos ver una clara tendencia por incorporar palabras extranjeras a nuestro lenguaje, y ello es fruto de la globalización. Sin ir más lejos, la propia ciudad de Los Angeles a duplicado el número de hispanos en apenas 30 años.
La colonización del espacio. Los habitantes de Los Angeles 2019 cómo Sebastian, simplemente están allí por su imposibilidad de viajar a otros planetas. Y los replicantes, escapan de una colonia exterior para viajar a la Tierra en busca de respuestas. En fin, el caso es que desde que en 1972 el hombre viajara a la luna, lo más cercano de repetir la azaña ha sido viajar a 400 km de la Tierra, destino a la Estación Espacial Internacional.
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